Una vez más, el equipo Caja Rural-Seguros RGA se vació en busca de la victoria en el Tour du Finistère, prueba de la Copa de Francia en la que la formación verde colocó a dos corredores entre los diez mejores del día: 6° Eduard Prades y 9° Joel Nicolau en el triunfo de Benoit Cosnefroy.
La actitud y el buen trabajo colectivo se redondeó con la presencia de otros tres corredores entre los 20 primeros: 11° Orluis Aular, 18° Fernando Barceló y 20° Gorka Sorarrain. Entre todos suman un botín de 81 puntos UCI, que mantienen al equipo en una buena posición.
Un resultado cimentado en el gran nivel del equipo, con los siete ciclistas peleando hasta el final. Primero fue Mulu Hailemichael quien buscó sorprender al pelotón con un ataque en los últimos kilómetros, y después en la subida final emergió la buena actitud global, con los catalanes Joel y Edu muy atentos en cabeza, especialmente este último que lanzó el sprint encabezando la carrera hasta los cien metros finales.
Eduard Prades: “Sabía que estaba bien, que podía hacerlo bien en esta llegada. Igual nos ha faltado hablar un poquito más entre nosotros para intentarlo antes con fuerza. En la última subida, a la mitad, nos hemos quedado parados tanto Fer como yo. Y ya después iba con el ansia de progresar y progresar. A falta de 300 metros, se han abierto mucho y he visto el hueco por dentro. He pasado y he tomado la curva primero. Estaba muy lejos de meta y con el viento de cara, He dudado en salir sprintando, pero al final he arrancado el sprint desde la primera posición y eso en parte ha sido un suicidio. Pero bueno, era ya lo único que podía hacer en ese momento. Si hubiera arrancado el sprint desde ya 300 con todo, pues igual podría haber disputado por el pódium. Pero bueno, las cosas se dan como se dan, así que estoy contento porque veo que estaba para disputar pero al mismo tiempo ves que si vas para disputar y haces sexto, pues también te muerdes las uñas».
Imagen: Cassandra Donne